Durante el embarazo, las altas temperaturas pueden afectar el buen descanso. En este artículo te compartimos cómo hacer para superar las dificultades y dormir bien.
No hace falta estar viviendo un embarazo para que el calor afecte tu descanso. La realidad es que siempre la temperatura condiciona los hábitos de sueño.
En ese sentido, las recomendaciones que ofrecemos en esta nota pueden resultar útiles para cualquier persona que sufra la climatización a la hora de dormir.
En este artículo respondemos sobre por qué el calor afecta particularmente a las embarazadas y brindamos algunas sugerencias para dormir bien a pesar de las altas temperaturas.
¿Por qué el calor afecta el descanso durante el embarazo?
El embarazo es una etapa emocionante, pero también puede resultar extenuante si el calor no te permite un descanso apropiado.
Por supuesto que todas las personas se ven afectadas por las altas temperaturas al momento de dormir. Sin embargo, como futura mamá, tendrás algunas condiciones extras que provocan que te sientas más incómoda.
Algunas de las razones que ocasiona que en el embarazo se sufra más el calor son:
- El aumento del metabolismo basal y flujo sanguíneo.
- Mayor sudor por la producción de hormonas, causando pérdida de líquido.
- Retención de líquidos que provoca hinchazón en las piernas e impresión de calor.
- Necesidad de más oxígeno y, por lo tanto, sensación de quedar sin aliento en condiciones de altas temperaturas.
- Aumento de peso que provoca mayor esfuerzo en la movilidad.
- Dificultades para regular la temperatura corporal.
Como verás, los cambios fisiológicos y hormonales durante el embarazo hacen que te cueste más atravesar las noches de altas temperaturas.
Aún así, no te des por vencida. Es posible volver a disfrutar de un sueño tranquilo siguiendo algunas simples recomendaciones que te contamos en el siguiente título.
Dormir bien es fundamental para tu salud y la de tu bebé. El cuerpo necesita descansar y recuperarse para realizar procesos importantes como la regeneración celular y la producción de hormonas.
Además, un sueño adecuado te permite reducir el estrés y tener un embarazo más saludable, con menor riesgo de sufrir complicaciones físicos o emocionales.
Lo importante es que estés determinada a superarlo, sabiendo que el esfuerzo valdrá la pena por vos y tu bebé en camino.
Recomendaciones para dormir bien en el embarazo
Sin más preámbulos, ahora compartiremos algunas recomendaciones que te ayudarán a descansar mejor durante el periodo de embarazo.
Recordá que, si bien nuestros consejos pueden serte muy útiles, es importante que le expreses al profesional que está dando seguimiento a tu embarazo sobre tus dificultades con el calor y el sueño.
Un especialista podrá orientarte con mayor exactitud sobre tu problema y definir si lo que te sucede se encuentra dentro de los parámetros normales.
Hecha esta aclaración, comencemos con las claves para mejorar el descanso durante las noches de calor.
1. Climatización en la habitación
La temperatura del dormitorio afecta directamente la sensación de sofocación que podés llegar a sentir.
Cuando durante el día el clima supera los 35 grados centígrados, los ladrillos se sobrecalientan provocando calor dentro de la casa.
La clave para que esto no ocurra es mantener fresco el hogar, o al menos la habitación. Algunas formas de lograrlo son:
- Abrir las ventanas y ventilar los espacios por la madrugada o la noche
- Instalar un toldo que evite el sol directo a la ventana
- Regar el pasto y mojar el piso de la galería
- Bajar las persianas durante las horas de mayor sol
- Climatizar con aire acondicionado o ventilador
- Plantar un árbol que de sombra
- Desenchufar los aparatos electrónicos
- No usar electrodomésticos que generen calor (como el horno)
- Utilizar luces tenues
- Mantener limpia la habitación
Siguiendo estos tips podés bajar, al menos, tres grados la temperatura dentro del hogar. Tu dormitorio se mantendrá más fresco y te sentirás más aliviada del calor.
2. Ropa cómoda y fresca
Otra clave refrescante es la ropa que vestís para dormir y la blanquería de verano que usás para cubrir tu cama.
Respecto al pijama o camisón, te sugerimos usar prendas sueltas (no muy grandes para que no incomode, ni muy apretadas que te hagan sofocar). Elegí con calma la medida teniendo en cuenta su material de confección.
El algodón y la seda son la indumentaria predilecta para los meses de verano. Otorgan frescura y transpirabilidad.
Pasando a la blanquería, lo apropiado para una cama fresca es:
- Colchón de dos caras para ser rotado según la estación del año
- Sábanas de algodón o composición mixta con mayor porcentaje de algodón
- Cubrecamas livianos y transpirables
- Almohada termorreguladora
- Cubrecolchón de algodón
La limpieza regular de las sábanas en verano también genera una cuota de frescura. Cambialas cada siete días y te sentirás mucho mejor.
3. Postura ideal
Por supuesto que la postura es otro condicionante del calor a la hora de dormir. Esto es porque existen posiciones con mayor contacto y presión sobre el cuerpo que otras.
Los especialistas sugieren que la mejor postura que pueden adoptar las futuras mamás para descansar es de lado izquierdo con una almohada entre las piernas.
Los beneficios de dormir de esta manera son:
- Evita que el peso del útero presione sobre otros órganos
- Brinda mejor circulación de sangre en la placenta
- Disminuye el riesgo de varices vaginales
- Evita el reflujo y la acidez
- Ayuda a levantarte sin tensar el cuello
- Brinda mayor comodidad y sensación de frescura
Como verás, vale la pena intentarlo y dormir en la posición que más provecho ofrece para vos y tu bebé.
4. Buena hidratación
Como mencionamos anteriormente, durante el embarazo la mujer elabora mayor cantidad de hormonas que le provocan transpirar más.
Por esa razón, tenés que atender con cuidado tu hidratación. La pérdida de líquido puede provocar estreñimiento, sensación de calor extremo y deshidratación.
Para que esto no ocurra y puedas dormir tranquila, te recomendamos:
- Beber ocho vasos de agua por día
- Comer frutas y verduras ricos en agua (pepinos, sandía, naranja, tomate, etc)
- Estar atenta a las señales de tu cuerpo (boca seca, orina oscura o mareos)
- Tomar agua a penas tengas sed
- Evitar el sobrecalentamiento y la insolación
En definitiva, una buena hidratación mejora tu descanso y tu rutina diaria como embarazada.
Conclusiones
Durante el embarazo el buen descanso puede convertirse en un gran desafío.
La ansiedad por la etapa que transitás, la dificultad postural al recostarte y el calor, puede generar insomnio en el embarazo.
Para vencer la sensación de sofocación en las noches con altas temperaturas, te recomendamos:
- Mantener el dormitorio fresco con una buena climatización
- Usar prendas frescas y blanquería de verano
- Dormir sobre el costado izquierdo con una almohada entre las piernas
- Hidratarte correctamente
Estos cuatro tips te ayudarán a mejorar tu calidad de descanso y tener días más tranquilos, productivos, saludables y felices junto a tu bebé.
Debe estar conectado para enviar un comentario.