¿Cómo incorporar la meditación a tu rutina de descanso?

En este artículo te contamos cómo la meditación puede convertirse en una actividad ideal para concluir el día y mejorar la calidad de sueño. 

Una rutina de descanso es una serie de hábitos y actividades que se realizan antes de dormir y permiten preparar el cuerpo y la mente para lograr un sueño rápido y profundo.

Por eso, en este artículo queremos compartirte sobre:

• Beneficios de la meditación en la rutina de descanso
• ¿Cómo debo prepararme antes de meditar?
• Tipos de meditación
• Conclusiones

Beneficios de la meditación en la rutina de descanso

Si bien, muchas veces se piensa en la meditación para iniciar el día, incorporarla en tu rutina de descanso tiene grandes beneficios.

Algunos de ellos son:

1. Reduce el estrés: Meditar antes de dormir ayuda a disminuir la actividad mental y la tensión que acumulaste durante el día. Estar relajado es fundamental para entrar en la fase de sueño.
2. Redirecciona los pensamientos: Si no podés dormir por pensamientos invasivos y preocupaciones excesivas, enfocar la atención en el presente te permitirá calmar la mente y devolverte la paz.
3. Promueve la autoconciencia: Meditar antes de dormir es como consultar con la almohada. Con esto nos referimos a que puede ayudarte a comprender tus propias emociones y pensamientos, capacitándote para controlar el estrés y tomar buenas decisiones en general.
4. Más salud: Al lograr lidiar mejor con tus ansiedades, tensiones, pensamientos y emociones, tu bienestar y salud aumentan.
5. Mejora la calidad de sueño: Iniciar el sueño con menos ansiedad te ayudará a dormir más rápido, profundo y de corrido.

La meditación es una práctica personal donde los resultados también son individuales.

Por esa razón, es importante que busques para tu rutina el tipo de ejercicio que mejor te proporcione la calma y bienestar.

Si probaste alguna y no resultó, podés intentar con otra que te brinde los beneficios que estás necesitando. 

¿Cómo debo prepararme antes de meditar?

La práctica de la meditación requiere de una preparación previa que facilite a tu cuerpo y mente entrar en el proceso.

De no acondicionar el espacio adecuadamente, lo más probable es que los efectos y su eficacia sean mínimos o nulos.

Algunas recomendaciones que debés tener presente antes de meditar son:

1. El lugar debe estar limpio, ordenado y sin distracciones
2. En los posible, buscá un espacio donde nadie pueda interrumpirte
3. Separá entre 15 y 20 minutos diarios
4. Elegí un horario nocturno regular que puedas mantener a lo largo de la semana
5. Desconectá los aparatos electrónicos que puedan desconcentrarte
6. Usá ropa suelta y cómoda que te permita respirar y moverte con facilidad
7. Buscá una postura placentera que ayude a relajarte
8. Hacé respiraciones profundas para centrar tu atención en el momento presente

Si recién estás iniciando el camino de la meditación, es importante que seas paciente con los resultados.

No te decepcionés si al comienzo no lográs concentrarte. La meditación es un hábito que mejora con la práctica. 

Tipos de meditación

Por suerte, existen muchas formas de enfocar tu mente y relajarte. Lo importante es poder encontrar aquellas que mejor se adapten a tus objetivos y personalidad.

En esta sección, vamos a compartirte tres tipos de meditación que pueden ayudarte a la hora de conciliar el sueño.

1. Meditación guiada

Esta técnica es una opción ideal para personas que recién se inician en el camino de la meditación. 

Pasos a seguir: 

1. Disponé de 5 a 30 minutos
2. Buscá la grabación de un instructor (puede ser por youtube)
3. Acomodate sentado o acostado en un lugar cerrado o abierto
4. Seguí las instrucciones de la grabación
5. El guía te invitará a imaginarte diferentes escenarios, como puede ser un paisaje natural, un espacio tranquilo o un lugar dentro de tu mente. Si te concentrás bien, seguro vas a poder sentir diferentes sensaciones y emociones.
6. La sesión puede llegar a incluir algunas técnicas de respiración profunda 
7. Al finalizar, abrí los ojos lentamente y tomate un momento para hacer ejercicios de estiramiento

2. Respiración consciente

Este ejercicio consiste en tratar de mantener la atención en la respiración contando las inhalaciones y exhalaciones.

Pasos a seguir:

1. Sentate cómodamente, manteniendo la columna vertebral derecha y los pies apoyados en el suelo
2. El lugar debe ser tranquilo, silencioso y sin interrupciones
3. Cerrando los ojos, comenzá a respirar lento y profundamente
4. Concentrate en la sensación de la respiración entrando y saliendo de tu cuerpo
5. Si tu mente comienza a divagar, simplemente dejá que los pensamientos pasen de largo y volvé a centrarte en la respiración
6. Lo ideal es que la sesión dure entre 10 y 20 minutos pero, inicialmente, podés comenzar con dos o tres minutos e ir aumentando el tiempo de manera progresiva
7. Una vez que terminés, abrí los ojos lentamente y tomate un momento para estirarte

3. Escaneo corporal

Este tipo de meditación intenta relajar cada músculo a través de la concentración intensa en cada parte del cuerpo, comenzando por los pies y avanzando hacia la cabeza.

Pasos a seguir:

1. Sentate o acostate cómodamente en un lugar tranquilo
2. Cerrá los ojos y comenzá a respirar lento y profundamente
3. Concentrate en la sensación de respirar
4. Enfocá tu atención a las diferentes partes del cuerpo, desde los dedos del pie hasta la cabeza
5. Si la mente divaga, simplemente volvé a centrarte en tu cuerpo
6. Si sentís algún dolor, intentá relajar esa zona
7. Lo ideal es que la sesión dure entre 10 y 20 minutos, pero, inicialmente, podés comenzar con dos o tres minutos e ir aumentando el tiempo de manera progresiva
8. Una vez que terminés, abrí los ojos lentamente y tomate un momento para estirarte

Conclusiones

La meditación es un hábito ideal para incorporar a tu rutina de descanso porque te permite disminuir la actividad mental, controlar el estrés y disipar las preocupaciones.

Gracias a ella vas a poder dormirte más rápido y mejorar la profundidad y calidad de sueño.

Hay varios tipos de meditación, pero si estás comenzando, te recomendamos empezar por las técnicas más sencillas. Algunas de ellas pueden ser:

1. Meditación guiada
2. Respiración consciente
3. Escaneo corporal

Tomarte unos pocos minutos antes de dormir para enfocar tus pensamientos y relajar tu mente, seguramente te brindará un mejor descanso.