Es común que por el uso que le damos al colchón en algún momento puedan ocurrir percances que dejen manchas en él. En ese momento te desesperas y parece que la única solución es comprar uno nuevo. Pero sí hay solución y en esta nota te contamos cómo hacerlo.
Para lograr un buen descanso se recomienda entre otras cosas, adecuar el ambiente. Esto quiere decir que debemos mantener la habitación ordenada y libre de ruidos, apagar el televisor, mantener una temperatura ambiente adecuada y lo más oscuro posible el dormitorio.
Pero… hay otro factor importante que por lo general se deja de lado o no se le presta demasiada atención y es el colchón, parte fundamental de la cama. Es el que nos brinda comodidad y colabora en nuestro sueño.
Es por esto que al momento de comprar un colchón debemos tener en cuenta nuestras necesidades para elegir el adecuado y después mantenerlo limpio e higienizado. Esto último hace que dure más tiempo y que tu salud no se vea perjudicada.
La limpieza debe hacerse periódicamente, incluso todos los días podemos realizar pequeñas acciones que ayudan en la tarea. Se recomienda no hacer la cama apenas nos levantamos sino esperar por lo menos dos horas, sacudir las sábanas y ventilar la habitación.
Si limpiamos el colchón evitamos ácaros, bacterias y hongos que pueden infectarlo y provocarnos alergias, problemas en la piel, dolores de cabeza, ojos rojos y lagrimeo. Por eso los expertos insisten en la higiene de nuestra cama.
Si viste o nunca limpiaste tu colchón, es importante que ahora que sabes lo que puede provocar lo pongas en práctica. Si tenes dudas sobre cuál es la mejor forma de limpiarlo y cuándo hacerlo te invitamos a seguir leyendo esta nota en la que encontrarás la respuesta.
Con qué productos limpiar el colchón
Para limpiar y quitar las manchas de nuestro colchón no es necesario invertir mucho dinero en productos, para esta tarea podemos usar cosas que siempre tenemos a mano en casa y que son opciones económicas.
Entre los elementos más efectivos para realizar una correcta limpieza encontramos:
- Agua y limón: es ideal para manchas de orina, sudor y vómito y es útil para eliminar los olores del colchón de forma permanente.
- Bicarbonato: el bicarbonato tiene múltiples usos, entre ellos, sacar las manchas difíciles de los colchones. Si se mezcla con agua tibia o con vinagre se genera una pasta que ayuda en la eliminación de manchas.
- Vinagre: tanto para manchas de orina o de sudor, el vinagre blanco es muy efectivo. Se aplica frotando la zona afectada con un paño húmedo.
- Agua oxigenada: es muy eficiente contra las manchas de sangre. Se coloca directamente sobre ella con ayuda de un paño o de un algodón.
- Detergente: el detergente, mejor si es líquido, se aplica frotando la zona con un paño humedecido con un poco de agua y se deja actuar unos minutos. Se limpia con agua y se seca bien.
Cómo limpiar el colchón según el tipo de mancha
Hay manchas que creemos son imposibles de sacar que no son las de suciedad, polvo o sudor. Cuando nos encontramos con ellas pensamos que la única opción que nos queda es reemplazar el colchón, pero sí hay formas de quitar esas manchas difíciles.
Te contamos cuáles son y cómo se pueden tratar:
- De orina:
Este tipo de manchas son muy frecuentes en los colchones de los niños y se dan más de una vez. Cuando esto pasa, sacamos las sábanas y el protector (si es que lo tenemos) y lo ponemos en remojo y después lo llevamos al lavarropas. Pero nunca nos damos cuenta de que no nos estamos ocupando del colchón, que se ve muy afectado por la orina sobre todo si pasó bastante tiempo. Generalmente lo dejamos ventilar un día o medio día y volvemos a armar la cama sin ocuparnos de él.
Hay una forma de quitar esas manchas y el olor a orina. Para hacerlo hay que mezclar cuatro partes de agua y una de vinagre blanco, rociar, dejar actuar y secar.
En caso de que la mancha se haya secado podemos usar bicarbonato sólo o hacer un preparado con 235 ml de agua oxigenada y tres cucharadas de bicarbonato.
Si usamos solo bicarbonato lo vamos a espolvorear sobre la zona afectada, cubrirlo con un plástico y dejarlo así toda la noche. Al día siguiente retiramos el envoltorio y aspiramos la mezcla. Si lo combinamos con agua oxigenada, hacemos el mismo procedimiento que con el vinagre blanco.
- De sudor:
Las manchas de sudor son las que más se suelen acumular en el colchón. Generalmente como hacemos con las manchas de orina, dejamos que el colchón se ventile durante un tiempo, lavamos las sábanas y las volvemos a poner como siempre.
Esta ventilación no es suficiente, es necesario tratar directamente la mancha. Lo más efectivo es preparar una mezcla de amoniaco, agua y jabón líquido. Se coloca frotando la superficie con una esponja bien escurrida, se deja actuar unos minutos y se seca.
- De sangre:
Hay que tener cuidado con las manchas de sangre porque si no se tratan pueden penetrar en el colchón y ya sabemos que algo difícil de sacar.
Para eliminar estas manchas debemos aplicar un poco de agua oxigenada, esperar a que salgan las burbujas y retirar con un paño limpio. Si la mancha está recién hecha podemos frotar el colchón con un poco de agua o leche fría para que no penetre en el tejido.
Cuando la mancha de sangre está seca o penetró en los tejidos se debe usar una mezcla con una parte de bicarbonato y dos de agua fría. Se extiende ese preparado con un paño humedecido y se deja actuar 30 minutos. Después se retira con agua y se seca bien.
- De humedad:
Cuando las manchas de sudor se acumulan aparecen las humedades. Por lo general cuando se descubren este tipo de manchas ya no se puede hacer nada porque han perjudicado de manera considerable el colchón.
Si aparecen de forma aislada es posible combatirlas. Lo primero que debemos hacer es airear el colchón, preferiblemente al sol, para ayudar a secar la humedad. Después pasar la aspiradora para quitar el moho y aplicar un disolvente que se consigue en las droguerías. Enjuagar bien con agua tibia y aplicar un desinfectante.
Si la humedad persiste o reaparece el moho, la mejor solución es cambiar el colchón.
- De vómito:
En estos casos lo primero que se debe hacer es quitar las sábanas y cambiarlas por otras limpias. Después se debe rociar la zona con vinagre y dejar actuar durante unos 10 minutos. Luego espolvorear bicarbonato, dejar que haga efervescencia y pasar la aspiradora para retirarlo.
Si la mancha no se va, debemos frotar el colchón con una esponja humedecida con agua oxigenada.
Cómo mantener limpio el colchón
Existen formas de mantener limpio e higienizado nuestro colchón sin esperar a que se manche por alguna causa para hacerlo solo en ese momento. Si le hacemos un mantenimiento continuo podemos lograr también alargar la vida útil de nuestro colchón.
Aún así, el desgaste por el uso y la limpieza terminarán dañando nuestro colchón. Es por eso que se recomienda cambiarlo entre los 7-10 años de uso, ya que dormir en un colchón desgastado por el paso del tiempo y el uso sin cuidados puede traernos problemas en el sueño y afectar nuestra salud.
Limpieza diaria
Para mantener limpio el colchón debemos ventilar la habitación todos los días antes de hacer la cama, sacudir bien las sábanas y cambiarlas cada una o dos veces por semana. Cuando hacemos esto debemos aspirar la superficie del colchón para evitar que el polvo y los ácaros se acumulen. Además, si antes de aspirar espolvoreamos bicarbonato y lo frotamos bien vamos a lograr una limpieza más efectiva.
Limpieza a fondo
Este tipo de limpieza del colchón se recomienda hacerla una vez cada 6 meses, en el momento en el que también rotamos el colchón. Para una limpieza en profundidad, primero tenemos que aspirar el colchón. Después debemos realizar una espuma mezclando una cucharada sopera de detergente líquido para la ropa en 1 litro de agua muy fría. Con esta espuma y la ayuda de una esponja se frota el colchón con movimientos circulares. Nos detenemos más tiempo en las zonas en las que haya manchas. Dejamos secar el colchón al aire libre o lo hacemos con un secador.
Eliminar olores
Los olores son molestos a la hora de dormir y por lo general las responsables de los malos olores suelen ser bacterias y gérmenes.
Para eliminarlos lo mejor es en cada limpieza semanal espolvorear en toda la superficie del colchón un poco de bicarbonato y pasar la aspiradora. Si los olores son muy profundos y persistentes podemos espolvorear el bicarbonato, cubrirlo y dejarlo actuar toda la noche. A la mañana siguiente se aspira y se rocía un poco de desinfectante.
Es necesario prestarle atención al colchón así como lo hacemos con las sábanas no solo para cuidarlo y que alargar su vida útil sino también, y sobre todo, para que los gérmenes no afecten nuestra salud.
Para garantizar un buen descanso debemos implementar acciones que lo propicien, entre ellas la limpieza y el mantenimiento del colchón. También les recomendados implementar protectores que evitan que los gérmenes penetren en el colchón y se pueden limpiar fácilmente.
Ahora que se conocen las medidas efectivas para hacerlo, es el momento de darle la importancia que merece a nuestro aliado ¡el colchón!
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